domingo, 12 de septiembre de 2010

PERMISO...

Espero que me permita asesinarlo un poco,
aunque sea levemente,
aunque sólo sea estrangular su cabeza
como si rompiera una caja de cartón.

Espero su beneplácito
para hundir mi amargura en su vientre
como si clavara un cuchillo en la mantequilla,

pero eso sí, sin reparos,
sin rencores, como amigos...

1 comentario: