Un fantasma indeciso
paseaba por el sol saliendo del cementerio.
Dos chicas adolescentes se burlaban de su sudario
y se reían sin ninguna consideración.
Al fantasma le crecieron dos colmillos blancos
con los que intentó devorarlas y llevarlas al infierno.
Las muchachas reaccionaron
y le dieron tal paliza
que regresó a su tumba sollozando y sin ninguna decisión.
sábado, 2 de mayo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario